El cuero cabelludo, al igual que cualquier otra parte de nuestra piel, es susceptible a diversas enfermedades y afecciones. Estas pueden manifestarse de diversas formas, desde una simple caspa hasta condiciones más complejas que requieren atención médica especializada. Entre las enfermedades del cuero cabelludo más comunes se encuentran la dermatitis seborreica, la psoriasis, la alopecia areata y la tiña. La dermatitis seborreica se caracteriza por la aparición de escamas aceitosas y enrojecimiento en el cuero cabelludo, a menudo acompañada de picazón. La psoriasis, por su parte, causa placas rojas y escamosas que pueden afectar tanto al cuero cabelludo como a otras áreas del cuerpo. La alopecia areata es una enfermedad autoinmune que provoca la caída del cabello en parches circulares, mientras que la tiña es una infección fúngica que se manifiesta como parches escamosos y con picazón. Además de estas enfermedades, existen otras afecciones menos comunes que pueden afectar el cuero cabelludo, como el lupus, el liquen plano y la foliculitis. Los síntomas y la gravedad de estas enfermedades pueden variar ampliamente, desde una leve irritación hasta una pérdida de cabello significativa. Es importante destacar que muchas de estas afecciones pueden ser tratadas con éxito, pero es fundamental consultar a un dermatólogo para recibir un diagnóstico preciso y un tratamiento adecuado. Un diagnóstico temprano y un tratamiento oportuno pueden ayudar a prevenir complicaciones y mejorar la calidad de vida de los pacientes.